Para dar un tono más bonito a un mueble de madera sin pintar, guarde por unos días los residuos de café. Ligeramente mojados en agua, sirven para dar color aplicándolos con un trapo.
Se debe pasar siempre en la dirección de la madera, evitando los movimientos rotativos. Repita este paso hasta obtener el tono deseado. Deje secar, luego saque cuiadadosamente los granos de café y por último encere.